Loción capilar

Desde antiguo se utilizaban los vinagres para la belleza de la piel y del cabello, además de para la mesa, la limpieza y la salud.

Ahora no necesitamos lavar el pelo con estos antiguos «afeites» y aplicar esas pomadas capilares que usaban, pero el vinagre sigue siendo un gran aliado en nuestro cuidado capilar.

De ahí esta loción a base de vinagre y hierbas a medida de cada cabello o momento, que deja el pelo brillante, suave y sedoso.

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Se aplica sobre el cuero cabelludo y el pelo de la cabeza una vez está limpio el cabello. Se deja unos segundos y se aclara. Al escurrir ya va llegando a medios y puntas y hace su efecto en el resto.  En teoría no hace falta aclarar, pero yo siempre lo hago . No te preocupes por el olor del vinagre, lo aclares o no. Éste desaparece enseguida y deja paso al agradable aroma de los aceites esenciales o fragancias utilizadas.

Para hacerlo, sólo necesitas un buen vinagre (yo uso de manzana ecológico, pero puedes usar el vinagre de vino si quieres también), que mezclarás con 4 partes de agua. Aquí puedes echar a volar tu imaginación o adaptar según tus necesidades, cambiando el agua por una infusión de hierbas, un hidrolato, café… Cuidado con la concentración de hierbas o café, pues pueden dejar residuo. También puedes macerar las hierbas en el vinagre y extraer así sus propiedades para aplicarlas en el cabello…

O sea, que la proporción sería: 1 litro de agua+250ml de vinagre. Así es como lo hago yo y me va bien. Hay quien usa menos agua.

Lo que no debes hacer nunca es pasarte con la cantidad de vinagre, ni usarlo directamente sin diluir

pues es un ácido y puede dañarte el cuero cabelludo o el cabello, sobre todo si eres de piel delicada o sensible, o si tienes el cabello seco. A más de un@ le ha pasado y se ha llevado un disgusto. A esta mezcla le puedes añadir aceites esenciales con alguna intención, o porque te gusta su olor o porque sí, o alguna fragancia de grado cosmético que te guste para dejar un poco de olor en el pelo (aviso: no dura demasiado, pero es muy agradable hasta que se va desvaneciendo).

El hecho de usar vinagre es porque el limpiador (el champú) será más bien alcalino para que limpie. Y entonces puede alterar el ph de tu piel  y cabello elevándolos. Para equilibrar, se aplicaría un ácido, que en este caso sería el vinagre. Si el champú está bien formulado no hace falta, pero es verdad que a mí esta mezcla me encanta cómo me deja de suave, brillante y sedoso (aunque quizás deshace un poco mi onda y se me hace menos fácil sujetarlo, se escurren las horquillas y esas cosas). Y a la vez se queda desenredado y suelto. El vinagre además cierra las cutículas de la fibra capilar y por eso se ve más brillante y ayuda a rebajar el encrespamiento.

La frecuencia de uso que recomiendo sería de una vez a la semana en cabellos grasos, una cada dos semanas en cabellos normales y una cada 3 o 4 semanas en cabellos secos. Ya cada uno con la prueba va ajustando la dosis ideal para su cabello concreto 🧪